Gila, visionario, llamando por teléfono al enemigo
Tras casi 2 meses de interrupción por irregularidades ya superadas, de nuevo vuelvo a comparecer a petición del jurado. No es que la situación haya dejado de resultarme un tanto singular, pero al mismo tiempo me parece mucho más coherente que la infinidad de reuniones inútiles y absurdas en mi empresa, donde nadie decía lo que pensaba, ni tampoco se acostumbraba a pensar demasiado lo que se decía.
- Buenos días, me alegro de volver a verles. Me gustaría contarles un chiste económico. Va una empresa y gana durante el último año más de 10.000.000.000 €. A continuación dice que por culpa de la crisis tiene que abrir un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) que afectará a un 20% de la plantilla. Y al día siguiente, anuncia un plan de incentivos de 450.000.000 € para sus ejecutivos. El gobierno donde se encuentra la sede de esta empresa, se lamenta y dice que claro, al ser una empresa privada (sería más exacto decir privatizada, pues fue pública hasta finales de los 90), no puede hacer nada aunque le parezca bien la iniciativa. Concretamente la ministra de Economía lo critica manifestando que anunciar los incentivos para los directivos al mismo tiempo que se decide llevar a cabo un ERE, es una “falta de oportunidad”. Tras esta “contundente” crítica, el gobierno calla que EREs como se ven facilitados “gracias” a la última reforma laboral que promulgó. Y mientras, continua a lo suyo, nuevos recortes y privatiza que algo queda (hasta la ilusión de la lotería de Navidad está en el punto de mira privatizador).
Hago una pausa, y contemplo las caras de circunstancia de los miembros del jurado.
- No me extraña que la historia no les haya hecho ninguna gracia, e imagínense lo que pensarán los 5.600 empleados de Telefonica que se verán afectados en España. Pero no me negarán que la noticia supone una auténtica burla. Desgraciadamente, desde mi humilde punto de vista peor aún que el irresponsable comportamiento de la empresa y del gobierno, es el posicionamiento de buena parte de la opinión pública y de los medios de comunicación, justificando e incluso alabando la decisión de la compañía. Basan su apoyo en que pese a las astronómicas ganancias globales, el resultado operativo en España se ha reducido notablemente, hasta situarse en tan solo 6.511.000.000 € (ya sé que parece que esté continuando con el chiste, pero no), por lo que los recortes en la capacidad productiva (otro bonito eufemismo econocrático) son inevitables para sortear la crisis. El problema es que efectivamente cada año ganará menos en España, sobre todo si el resto de empresas sigue su ejemplo y se lanza a despedir masivamente a trabajadores. Y entonces los directivos del “blue chip” español afirmarán complacidos “Veis como teníamos que recortar nuestra estructura productiva en España”.
Como ejemplo del tratamiento informativo que está teniendo la noticia en los principales medios de comunicación, les he traído este artículo de El País. No porque sea el que más abiertamente haya alabado las decisiones de la compañía, pero si llama la atención el sospechoso nivel de sumisión con que se aborda la noticia, más sorprendente si cabe viniendo de un medio tradicionalmente crítico con estas prácticas empresariales. El título de por sí ya es bastante ilustrativo: “Telefónica da la cara”.
- ¿Alguna pregunta? ¿No? – los 6 miembros guardan silencio – Está bien, entonces para concluir me gustaría plantear un par de sencillas cuestiones:
1) ¿A que se debe este giro editorial del diario El País?
2) ¿Quién ha decidido el ERE y los bonus millonarios de Telefonica?
Nos vemos dentro de 15 días. Para obtener las respuestas, dad la vuelta a la pantalla. Y veréis como todo empieza a cuadrar…
No entiendo una cosa: ¿por qué has marcado con azul los accionistas de ambas que son bancos? Espero que no pretendas insinuar nada, economista humilde...
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